La Palabra Divina es saludable

"Toda palabra divina es saludable para quienes la entienden bien, y perjudicial para los que pretenden, según la perversidad de su corazón, torcerla antes que corregir su corazón conforme a la rectitud de ella. Esta es una costumbre de los hombres de inigualada perversidad, puesto que, debiendo vivir conforme a la voluntad de Dios, quieren que Dios viva según la suya. Y, no queriendo corregirse, pretenden hacer depravado a Dios, pensando que no es recto lo que Dios quiere, sino lo que ellos desean" (Comentario al salmo 48, 1, 1).

No hay comentarios:

Publicar un comentario