Con motivo del XVI centenario de la conversión de San Agustín, el beato Juan Pablo II escribió una carta apostólica: "AUGUSTINUM HIPPONENSEM"
"Cristo, hombre-Dios es el único mediador entre Dios justo e inmortal y los hombres mortales y pecadores, pues es mortal y justo contemporáneamente; por lo tanto es la vía universal de la libertad y de la salvación. Fuera de esta vía, que "nunca faltó al género humano, nadie ha sido jamás liberado, nadie es liberado, nadie será liberado".
La mediación de Cristo se realiza en la redención, que no consiste sólo en el ejemplo de justicia, sino sobre todo en el sacrificio de reconciliación que fue absolutamente verdadero, libérrimo , perfectísimo . La redención de Cristo tiene como carácter esencial la universalidad, la cual demuestra la universalidad del pecado. En este sentido Agustín repite e interpreta las palabras de San Pablo: "Si uno murió por todos, luego todos son muertos" (2 Cor 5, 14), muertos a causa del pecado. "Toda la fe cristiana consiste, pues, en la causa de dos hombres", "uno y uno: uno que lleva a la muerte, uno que da la vida". De donde se sigue que "todo hombre es Adán, como en los que creen todo hombre es Cristo"."
http://www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/apost_letters/documents/hf_jp-ii_apl_26081986_augustinum-hipponensem_sp.html
1 comentario:
No lo conocía. Gracias. Me ha encantado lo de "La mediación de Cristo se realiza en la redención, que no consiste sólo en el ejemplo de justicia, sino sobre todo en el sacrificio de reconciliación que fue absolutamente verdadero, libérrimo , perfectísimo .
Gracias¡
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